GUÍA COMPLETA DEL ETIQUETADO DE VINOS EN ESPAÑA Y EN LA UE
El etiquetado de vinos puede considerarse un aspecto que entra dentro de la estética de una marca o del diseño del embotellado. Sin embargo, existe una normativa que regula sus características y su contenido. El objetivo es que los consumidores obtengan toda la información que necesitan sobre la composición o el proceso de elaboración y garantizar la transparencia en el mercado.
En este artículo, te contamos qué dice la normativa actual y las novedades introducidas, como es la etiqueta electrónica.
Nueva normativa del etiquetado de vinos producidos en la UE
Recientemente, ha entrado en vigor una nueva normativa, que afecta a todos aquellos vinos que se hayan producido en la UE después del 8 de diciembre de 2023 o que se hayan importado después de esta fecha. Por tanto, productores y distribuidores de vino, así como fabricantes de etiquetas, necesitan conocer los nuevos requisitos de etiquetado.
Sin entrar demasiado en detalles, la normativa actual establece que todos los vinos producidos o importados que se ajusten a la fecha mencionada en el punto anterior deben incluir la información nutricional del vino. Es decir, sus ingredientes, alérgenos, energía y valor nutricional. El Reglamento (UE) 2021/2117 incorpora todos los detalles al respecto.
No obstante, hay una particularidad, y es que mientras la información sobre alérgenos e intolerancias debe mostrarse físicamente, la relativa a los ingredientes o el valor nutricional puede ir tanto en formato físico como electrónico. Para esta última opción habría que utilizar un código QR.
Todos aquellos vinos que no cumplan con esta nueva normativa sobre el etiquetado de productos, se retirarán del mercado y podrían incluso enfrentarse a una sanción. Estas medidas se establecen en cada país, por lo que habrá diferencias entre unos y otros. En cualquier caso, los detalles están en el Reglamento (UE) nº 1306/2013, capítulo IV, artículo 89.
Principales diferencias de requisitos de etiquetado con la anterior normativa
Las diferencias principales sobre el etiquetado de vinos entre esta normativa y la anterior pueden resumirse en dos. La primera es la presencia del código QR, que supone una innovación y una adaptación a los tiempos que corren.
En segundo lugar, la información que se incluye. Hasta ahora, las indicaciones mencionaban únicamente que tanto el contenido como la publicidad debían ser claros y veraces, para no llevar a los consumidores al error. Además, se establecía una información mínima obligatoria, que era la siguiente:
- Nombre de la marca
- Zona de producción y año de cosecha
- Grado alcohólico volumétrico adquirido y porcentaje de alcohol respecto al volumen
- Nombre y dirección del embotellador, lugar de embotellado y registros de embotellado y sanidad
- Contenido neto- Frase “contiene sulfitos”
Para aquellos vinos con denominación de origen, se exigía también un número de control de garantía. Y en las exportaciones, el registro de exportación.
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Ventajas del uso de la etiqueta electrónica en el etiquetado de productos
Como hemos visto, la llegada de la tecnología al etiquetado de productos vinícolas es la principal innovación, que pillará por sorpresa a más de una marca de vino y de etiquetadores. Pero, ¿cuáles son las ventajas que se pretenden ganar con este sistema?
Flexibilidad
Las etiquetas electrónicas permiten una mayor flexibilidad a la hora de presentar la información y, sobre todo, de actualizarla. Cada cierto tiempo, es probable que cambien los datos de la composición o su valor nutricional. Realizar las modificaciones en un formato electrónico resulta más sencillo y rápido que la impresión de etiquetas físicas nuevas.
Menos impacto ambiental
Reducir la información física que se debe presentar permite fabricar etiquetas de menor tamaño. Es decir, que se reduce el gasto de papel y demás materiales necesarios para el etiquetado de vinos, con el consecuente menor impacto ambiental. Esta medida va en la línea de la sostenibilidad ambiental que ya está transformando este sector, y en la que se encuentra también el vino ecológico.
Seguimiento y trazabilidad
La etiqueta electrónica facilita la integración de tecnologías de seguimiento y trazabilidad, para que los consumidores puedan acceder a información detallada sobre la composición de cada vino y los aditivos que lleva.
Mejor experiencia
La posibilidad de poder añadir contenido adicional con respecto al sistema anterior mejora la experiencia del consumidor. Además de tener un mayor conocimiento de lo que adquiere desde el punto de vista de la salud, puede acceder a otra información que sea de su interés.
¿Qué información deberá aparecer en el etiquetado de vinos?
La información específica a incluir en el etiquetado de vinos a partir de ahora es la información energética, que deberá figurar con el símbolo “E” para una ración de 100 ml, y los alérgenos potenciales bajo la palabra “Contiene”. El listado de estos y de las intolerancias está incluido en el Reglamento (UE) 1169/2011, en el artículo 9, sección 1, letra c).
En el código QR o una URL en la etiqueta, se mostrará la información nutricional y los ingredientes. En la etiqueta electrónica no puede aparecer nada relativo a la venta o la comercialización del producto.
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