Cómo preparar una dieta personalizada según diferentes necesidades nutricionales
La nutrición es un tema complejo. Aunque los estudios puedan sugerir una serie de hábitos concretos como saludables, después se deben personalizar para cada persona. Las características personales, las patologías, las preferencias o incluso las necesidades nutricionales varían de una a otra. Hoy veremos cómo se prepara una dieta personalizada.
No obstante, para llevar a cabo estos planes, se necesita contar con una formación profesional. Puesto que hablamos de una cuestión de salud, no basta con tener algunos conocimientos, sino que deben estar validados. Si quieres adquirir estas habilidades, puedes hacerlo con nuestro Grado Superior en Dietética. Un programa con un enfoque práctico y actualizado en nutrición personalizada.
Tipos de necesidades nutricionales que requieren de una dieta personalizada
Comenzamos por ver, en primer lugar, cuáles son las necesidades nutricionales que tenemos los humanos para que nuestro organismo funcione correctamente, pero en aquellos casos concretos en los que se requiere que la dieta sea personalizada.
Enfermedades crónicas
Padecer una patología es la causa principal por la que se pueden tener requerimientos nutricionales muy concretos que se salen de lo que consideramos sano y recomendable.
Si bien un plan nutricional personalizado nunca debería incluir alimentos de baja calidad o procesados, en este caso se refiere a modificaciones en las cantidades que tenemos por normales. Por ejemplo, personas con diabetes, hipertensión, obesidad o celiaquía necesitan ajustes específicos que regulen los niveles de azúcar, reduzcan el sodio o eviten el gluten.
Deportistas
La práctica habitual de algún deporte o la actividad física en general, siempre y cuando sea intensa, requieren de más calorías y nutrientes para que se pueda mantener el rendimiento. Al fin y al cabo, se trata de un desgaste, y por eso las necesidades nutricionales son más elevadas que las de alguien sedentario. La dieta debe optimizar la recuperación muscular, mejorar la resistencia y evitar lesiones.
Necesidades nutricionales en etapas especiales de la vida
Las mujeres embarazadas, menores en crecimiento o las personas mayores tienen necesidades nutricionales específicas. Por ejemplo, durante el embarazo, se necesita más ácido fólico y hierro, mientras que las personas de edad avanzada necesitan dietas más ricas en calcio y vitamina D.
Ventajas de seguir una dieta personalizada
Una dieta personalizada no solo sirve para satisfacer las necesidades nutricionales de una persona. Además, tiene los siguientes beneficios:
Mejora del estado de salud general
Una dieta personalizada aborda las deficiencias nutricionales específicas que se puedan tener. Por lo tanto, es una forma eficaz de reducir el riesgo de padecer ciertas enfermedades y de mejorar la vitalidad. Esta visión de la alimentación con un uso terapéutico se conoce como dietoterapia.
Mayor facilidad para seguir los planes nutricionales
Cuando un plan se adapta a las preferencias y el estilo de vida de cada persona, resulta más sencillo seguir las indicaciones y conseguir los beneficios asociados.
Optimización del rendimiento físico y mental
Cuando nuestro organismo recibe todos los nutrientes que necesita, tanto el cuerpo como la mente funcionan en su máxima capacidad. Si bien es algo importante para cualquier persona, lo es más para deportistas o personas con exigencias laborales altas.
Cómo preparar una dieta personalizada para personas con necesidades nutricionales especiales
Para diseñar una dieta personalizada que pueda satisfacer las necesidades nutricionales específicas que se tengan, hay que seguir estos pasos:
Evaluar las necesidades individuales
El primer paso es realizar una evaluación en profundidad del estado de salud, los hábitos alimenticios, el nivel de actividad física y los objetivos de la persona. De esta manera, se podrán tener en cuenta las limitaciones en los alimentos y sus cantidades por patologías o la adaptación al estilo de vida.
Calcular el valor nutricional adecuado
Cada persona tiene diferentes cantidades de calorías, macronutrientes y micronutrientes. Por tanto, no solo es importante saber calcular el valor nutricional de cada alimento, sino saber ajustarlo a los requerimientos que se tengan.
Diseñar el menú personalizado
El menú debe incluir alimentos variados que sean fáciles de preparar y que además sean del agrado de la persona. Por lo general, y salvo que se trate de una cuestión relevante de salud, se recomienda no hacer restricciones drásticas e innecesarias, puesto que suelen generar el efecto contrario. Se trata de encontrar un equilibrio entre proteínas, carbohidratos y grasas, al tiempo que se facilita el seguimiento del plan.
Hacer seguimiento y ajustes
Sin embargo, incluso cuando nos adaptamos a las preferencias de la persona y a las necesidades nutricionales, puede haber dificultades para seguir el plan. Por eso, las dietas personalizadas no son estáticas, sino que se adaptan continuamente. Además, a medida que la persona va progresando en sus objetivos, puede ser necesario volver a hacer una adaptación.
¿Quieres seguir aprendiendo sobre necesidades nutricionales y planes personalizados? Dispones de toda la información en nuestro grado.